lunes, 17 de agosto de 2009

PLUMA A PLUMA

Los plumeros ya no vienen como antes.

Los plumeros de mi infancia tenían plumas grandes que abarcaban una gran superficie del área a limpiar, y con una pasadita de ida y vuelta alcanzaba para renovar el aspecto del sector.

Hoy en día, es ya dificil encontrar un lugar que venda plumeros, y cuando se los encuentra, parecen mústios, hechos a base de excedente de paloma pichón.

¿Será que Greenpeace obliga a que junten los plumines que quedan pegados en los nidos y los hagan solo con eso; o que la vuelta de la Revista porteña ha llevado las plumas hacia un mercado mas glamoroso?

No hay comentarios:

Publicar un comentario