viernes, 6 de mayo de 2011

POINTSOFVIU

Onésimo Sarakatuc padecía de insomnio crónico. Para curarse intentó con los más diversos menjunjes, las más sofisticadas meditaciones y las menos confesables prácticas privadas.

Una noche de Agosto, Onésimo sintió sueño y se quedó profundamente dormido. Sin necesidad de contar ovejas, sin autoaplicarse digitopuntura y sin haber bebido ni un sorbo de su ya clásico té de tilo.

Menos mal que la ruta estaba vacía. No creo que Chevallier, su aseguradora ni el resto de los pasajeros hubieran valorado positivamente que Onésimo estuviese curado.

martes, 19 de abril de 2011

RESERVA

Es claro que después de una separación viene el período de duelo; pero no es tan claro cuando termina.

Uno puede darlo por terminado mentalmente, sentir nuevamente la actitud ganadora, retomar la iniciativa... pero inevitablemente está falto de futbol. Llega tarde a disputar balones clave, no lee bien las jugadas, se come los amagues y termina cometiendo fowl u otro tipo de falta que interrumpe el sano desarrollo del juego.

Paralelamente, el entorno solo habla de las jugadas de Messi, mientras uno ni siquiera está para ir al banco de la reserva y sería más parangonable como un Quique Hrabina del amor.

A veces uno cae en las jugadas de otro, pero hay que mantenerse en claro y no volver a rodar en historias complicadas... ¿para qué? Si ya tuvimos varias y todas terminaron en desazón.

Ahora está en claro que el standard pasó a ser "una morocha pilas que se ría". El tema es que el dato sigue siendo bastante amplio aún.

sábado, 26 de marzo de 2011

FINAL DEL DUELO

Hay un esquema pautado, pero los imprevistos ocurren y aparece la necesidad de improvisar. Ese es un problema para nosotros, los lentos.

En un momento en el que se viene acomodando mi paisaje, apareció una frase insinuante que -estoy seguro- se quedará repiqueteandome el cráneo durante toda una semana.

(Sumandose al rostro que la profirió, que ya repiquetea ahí desde antes).

Pero esta vez la inacción no se debió a mi condición de lento.

Simplemente, elegí escucharme.

Parece que mi duelo quiere arrimarse a su fin.

miércoles, 23 de marzo de 2011

DOBLE AMARILLA

La gente se divide en dos grandes grupos: los que solo piensan en ellos mismos y los que son capaces de brindarse con generosidad.

Los del primer grupo se definirán como integrantes del segundo. Porque la generosidad -como los libros de Borges- tiene a casi todos como adeptos de palabra, pero a casi nadie en la realidad de los hechos.

Los del segundo grupo pueden practicarla por convicción o como distracción de su propio foco. Me interesa sobremanera el subconjunto de quienes son generosos por convicción, y no para evitar hacer foco en sus cosas.

Curiosamente, la sensación de dar desinteresadamente, la de compartir lo poco que uno sabe cuando sabe que al otro le puede hacer muy bien... es única, maravillosa, engrandecedora.

Por otra parte, la mezquindad de no avisar de las oportunidades en pos de una supuesta ventajita, el deshonrar la amistad, el amarretear contactos, el autoerigirse en un pedestal de talento aparente, el plagiar en las sombras, el generarle malos momentos a los demás para lucir tu magnanimidad premoldeada, el decir que colaborarás con algo que finalmente boicoteás o el promover exclusivamente a los lameculos de tu culo ramplón... como L&M: marca tu nivel.

jueves, 17 de marzo de 2011

EL PODER DE LA METÁFORA

Todo el mundo se queja de los contenidos de la televisión. Los blancos preferidos son: Tinelli y Gran Hermano. Las opiniones suelen rematarse con "faltan contenidos culturales".

Me permito disentir.

Gran Hermano podría revestir un alto interés sociológico ¿Qué mueve a tantos a buscar un encierro televisado? ¿Cuál es el objetivo? ¿Con qué estrategia han entrado?

Lo curioso, es que esta es la sexta o séptima edición de Gran Hermano... y hasta ahora (salvo la de Trezeguet, cuyo planteo lúcido falló por la sensiblería de un auditorio que se salía de la vaina por aplicar premios y castigos morales), ningún participante arriesgó con un modo innovador de ganar el jueguito al que se expone.

Hola, quiero la fama, quiero "triunfar" y estoy dispuesto a decir a todos los vientos que la dignidad no es el valor que más pondero... y espero que ustedes me entiendan, me voten, me acompañen y además me conviertan en su ídolo.

¿Nadie arriesgó a hacerse pasar por un científico o un intelectual que denoste la fama efímera y que alegue haber entrado para conseguir financiamiento para un proyecto de investigación? Los mismos votos que condenaron a Trezeguet, los mismos comentaristas de pensamientos prefabricados seguramente los hubieran apoyado.

Mientras tanto, Encuentro y Canal A están... pero el gran número de audiencia elige otra cosa, aunque no debería sorprendernos porque fue "la gente" quién pidió que suelten a Barrabás. Y estuvo bien, si no: hoy no tendríamos metáfora.

miércoles, 16 de marzo de 2011

VOCARTÓN

El siglo XX ha vivido convencido de que la vocación era una.

Una y definitiva que encapsulaba a su portador dentro del verbo ser.

Así, mucha gente inteligente sigue definiéndose por lo que hace o por lo que estudió. Y mucho embutido que la va de agudo, usa el cliché para subirse a un pedestal que le es ajeno. O para descalificar a un innovador que irrumpe a dejar en evidencia su chatura, por contraste.

La generación de “cotos” a los que acceden solo los expertos, conspira contra el avance del pensamiento. Nuestro artículo catorce, sólo exige la idoneidad.
Es cierto que reducir trae certezas, pero parece un exceso hacer un concentrado en una sola arista, de la amplitud y riqueza de posibilidades que todo ser humano encierra.

¿Macedonio Fernández, Gandhi o Franz Kafka decían “soy” abogado?
¿Adolfo Bioy Casares se frustró por dejar la universidad?
¿Alguien puede “recibirse” de Filósofo o de Comunicador?

Almafuerte era Maestro aún sin título de magisterio, pero sus detractores supieron sacárselo del medio. Lo curioso es que al ocupar su lugar, no hacen más que demostrarle a todos el máximo nivel de supina incapacidad de la que son orgullosos dueños.

martes, 15 de marzo de 2011

RE- FLEXIVO

Para referir que tendremos una comunicación intrapersonal, los semiólogos amateurs solemos decir: -“Lo voy a consultar con mi almohada”.

¿Asumimos posturas cobardes si la almohada es de plumas? (erróneas o inconvenientes si además son de ganso) ¿Nos volvemos más dúctiles si se trata de gomaespuma? ¿Actuamos impulsivamente los que revoleamos la almohada a mitad de la noche?

¿Las almohadas ergonómicas son más complacientes y sumisas? Las almohadas altas, tendrán más contenido y profundidad de análisis, pero te parten el cuello ¿por intolerantes? ¿La almohada de Hitler, era de mármol o titanio?

¿Las fundas con flores aportan una visión naturalista? ¿Y las de seda y búlgaros? ¿Son europeizantes?

¿Cómo es el protocolo para iniciar el diálogo? ¿Hay que sacarle la funda para escuchar una verdad desnuda? Si no pongo la almohada en la cabecera, y la dejo a un costado ¿favorezco el pensamiento lateral?

Todo para evitar la mala prensa que genera: el caminar por la calle hablando solo.