Miguel Angel decía de su arte, que consistía en descubrir la escultura oculta adentro del bloque de mármol.
Por mi parte, cada vez que empecé a retirar excedentes de piedra bruta esperando desembalar una Piedad, solo encontré adefesios ocultos en ella.
Pensé que Miguel Angel era más afortunado que yo, o bien que de tanto esculpir, había entrenado su ojo para descubrir qué piedras encerraban obras maravillosas y cuales, adefesios como los míos. Y persistí, y persistí cincelando… pero aporta mas a mi felicidad, aceptar las cosas tal cual son.
Agradezco enormemente a los amigos que, amorosamente supieron guiarme y contenerme hasta que finalmente yo mismo pude ver con claridad, que soy un pésimo escultor.
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Hace 2 años
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